En el competitivo mundo de las redes sociales, los usuarios han disfrutado durante años de un acceso prácticamente sin costo a plataformas como TikTok e Instagram. Sin embargo, Simon Johnson, ganador del Nobel de Economía, plantea una controversial propuesta: ¿y si comenzáramos a pagar por usar estas redes? El pago por redes puede parecer una idea descabellada, pero Johnson cree que es una solución para abordar problemas que afectan tanto a usuarios como a la sociedad en general.
El trasfondo académico de Simon Johnson
Simon Johnson es un influyente académico que enseña en la Escuela de Administración Sloan del MIT. Su prestigio en el ámbito económico se consolidó en 2023, cuando junto a otros notables economistas como Daron Acemoglu y James A. Robinson, recibió el Nobel de Economía por su trabajo sobre la desigualdad de las naciones. Además de sus logros académicos, Johnson recientemente publicó el libro «Poder y progreso» donde examina los avances tecnológicos y su incidencia en segregar beneficios hacia las élites. La perspectiva de Johnson sobre el poder de las redes sociales es una extensión de su interés en cómo la tecnología moderna impacta en la economía global.
El poder oculto de las tecnológicas
En su análisis, Johnson compara el dominio de las grandes tecnológicas como Meta y Amazon con el poder industrial que se evidenció en el siglo XIX. En ese entonces, los magnates del petróleo y el acero detentaban una influencia abrumadora sobre el comercio y la democracia. Hoy, según Johnson, las tecnológicas tienen un efecto similar al manipular la forma en la que se recibe y procesa la información.
Redes sociales y la manipulación emocional
Johnson sugiere que al instaurar un modelo de pago por redes, podría evitarse la manipulación emocional que fomenta el modelo basado en publicidad. El objetivo es afrontar de manera directa los problemas inherentes de adicción y polarización que, según Johnson, son consecuencia de cómo actualmente operan plataformas como TikTok e Instagram. Una tarifa de suscripción podría ofrecer una alternativa más saludable y equilibrada para los usuarios.
Reconfigurando el modelo de negocio
El enfoque de Simon Johnson no se limita al pago por el uso de redes sociales. Inspirado por históricos precedentes como la división de Standard Oil en 1911, Johnson propone disolver las grandes tecnológicas para evitar monopolios. Argumenta que muchas de estas compañías están incentivadas para manipular emociones con tal de atraer la atención, lo que, en última instancia, aumenta sus ingresos publicitarios. Aunque no sin críticas, su propuesta busca generar un cambio significativo en la manera de operar de estas gigantes digitales.
Consecuencias sociales y democráticas
Más allá del ámbito puramente económico, Johnson alerta sobre las repercusiones sociales y democráticas que causan las redes sociales. La polarización y la manipulación de la información son barreras que obstaculizan una democracia saludable. Aunque durante el gobierno de Trump, las ideas de Johnson no fueron acogidas completamente, sigue siendo relevante en la continua discusión sobre la regulación tecnológica.
Estimado lector, el debate sobre el pago por redes es solo la punta del iceberg, la solución podría radicar en cambiar cómo percibimos y usamos estas plataformas. La charla está servida; ¿amigos o enemigos del modelo de suscripción? Así, como diría Fernando, vamos a darle vueltas al asunto, bro, y abrir el diálogo constructivo entre todos.